64.154 títulos

Librería de Praga

A algunos os sonarán títulos como "La isla de los conejos", "El colgajo" o "El sueño de la lengua común". Es posible que alguno lo tengáis languideciendo en una estantería fruto de un regalo de cumpleaños, pero a la mayoría no os sonarán de nada. Estos tres títulos —elegidos por mí al azar— formaron parte de la lista de 50 mejores libros de 2019 según el diario El País. Ese mismo año —último del que se tienen registros— se publicaron en España un total de 64.154 títulos —lo siento, no puedo calcular a cuantos campos de fútbol equivale esto— de los que 26.679 están bajo el epígrafe «literatura, historia y crítica literaria». Y esto solo contando con aquellas publicaciones que dieron de alta un ISBN, que se publicaron en formato físico y que no son reediciones ni reimpresiones.

Para que nos hagamos una idea, ese mismo año se estrenaron en cines un total de 655 películas. Esto es, se publicaron 100 libros por cada película estrenada. Vale, lo sé, no es lo mismo una cosa que la otra y sobre esto volveré luego, que primero hay más datos locos. Según el Ministerio de Cultura, la media de lectura trimestral fue de 4,8 libros leídos, algo más de un libro al mes.

Voy a hacer un poco de ficción. Supongamos que una persona leyese de media un libro a la semana a lo largo de toda su vida y que comenzase a leer a los 8 años de edad y mantuviese ese ritmo hasta los 85 años, solo podría leer 4158 libros a lo largo de toda su vida. Ahora bien, si nos mantenemos dentro de la estadística de una forma absolutamente estricta, esto es, 4,8 libros al trimestre, tan solo podremos disfrutar de 1540 títulos, así que supongo que es importante que los elijamos bien.

Con estos datos me vienen a la cabeza tres cosas. La primera es que el mercado editorial está muy saturado. La segunda es que cualquiera publica. La tercera es que se lee poco.

Y es que, a diferencia de una película, un libro lo puede escribir cualquiera con acceso a un ordenador —ni si quiera tiene que ser el propietario— y una buena —muy buena— cantidad de tiempo libre.

Vamos a quedarnos con la lista de los 26.679 libros que se publicaron como "literatura" que, ojo, no tiene por qué ser ficción. Creo que es evidente que no todos sus autores tienen una buena capacidad comunicativa a nivel escrito o que de tenerlo, lo más probable es que su poder creativo sea más bien pequeño. O sea, que no creo que en el mundo haya 26.000 Kenzaburo Oé simultáneos, pero la verdad es que me conformaría con que hubieran 5000 Francisco García Pavón. Y no estoy insinuando que cada vez se publican más y más tostones infumables para alimentar la industria editorial, lo estoy diciendo claramente.

Portada de "Físico y química" de Marta Monroy

Vamos a repasar otros títulos. "En bragas y a lo loco", "La becaria", "Buscando al lobo de las highlands", "Lo que está por llegar" o el mejor de todos estos títulos, "Físico y química", son algunos de los títulos (no elegidos tan al azar) que están entre los 20 más vendidos en Amazon Kindle en su versión de pago. Todos estos libros se pueden comprar en formato digital o se puede encargar una copia impresa y prácticamente ninguno de ellos tiene ISBN, por lo que nunca los podremos encontrar en una biblioteca ni en una librería, pero ya no hace falta. Ahora solo necesitas subir tu escrito a la plataforma, rellenar un formulario y ya está. Tú mismo estás vendiendo sin necesidad de un intermediario como pueda ser la editorial, la distribuidora o la cadena de librerías. Si en su próxima estadística de libros publicados en España el INE no cambia la metodología, ninguno de estos títulos aparecerán. Son libros condenados al olvido. Exactamente igual que la inmensa mayoría de libros publicados de forma tradicional. Solo que estos no contribuirán a ese ruido editorial al que nos estamos empezando a acostumbrar.

La buena noticia, entonces, será que cualquiera puede publicar —incluso artículos como este—. La mala noticia será que cualquiera puede publicar, no importa si con el respaldo de una editorial o por su cuenta. Así que al final acabaremos leyendo algo que esté en la lista de 50 mejores libros publicados este año de nuestro periódico favorito. Y es que nadie lee un libro que no le haya recomendado otra persona antes. Solo tenemos que asegurarnos de que esa persona tiene nuestros mismos gustos, y aquí es donde entran las redes sociales como Goodreads, donde los usuarios suben sus reseñas y donde puedes llevar un seguimiento de tus propias lecturas. Ahora bien, esto está muy lejos de ser una solución.