top of page
Foto del escritorLiber Alis

ESCENARIOS DE NOVELA: "El último akelarre" de Ibón Martín




Tenía pendiente este escenario desde ESTA entrada al blog.


Como contaba entonces, estuve unos días por Navarra, podía decir que siguiendo la pista de Leire Altuna, pero en realidad, huía del calor. Durante el viaje recorrí algunos escenarios en los que discurre la saga de Ibón Martín (Donosti 1976), así que no podía evitar una visita al pueblo de Zugarramurdi y a sus míticas cuevas. Por si alguno anda despistado (o sólo ha visto la peli de Alex de la Iglesia), ahí, en esa zona del pirineo navarro, en las proximidades del valle de Batzan, se vivieron en el siglo XVII persecuciones y juicios a aldeanos y sobre todo, aldeanas, acusados por la Santa Inquisición de cometer actos de brujería. El detonante eran calumnias, envidias y "malos entendidos" entre vecinos que derivaron en un acto de fe sucedido en Logroño, en noviembre de 1610. Aquellos que no se retractaron, vivos o ya muertos, fueron quemados en la hoguera. Supuestamente, el lugar donde las brujas se reunían para sus actos diabólicos y akelarres eran unas cuevas que, hoy, son la máxima atracción turística del pueblo de Zugarramurdi. Abajo os dejo unas fotos y aquí la información. .

Además de las cuevas, hay un interesante museo que relata este pasaje con exposiciones etnográficas sobre la época, videos, copias de documentos, etc. Aquí, la información sobre el Museo.


En esta ocasión, la novela se ambienta en dos escenarios y en dos tiempos, pero con tres historias. Por un lado, tenemos a Leire y Ane investigando un crimen (estéticamente horrendo; Ibón no se corta mucho a la hora de crear escenarios realmente dramáticos) sucedido en la actual Bilbao. Por otro lado, también en la actualidad, tenemos a Nekane, una quesera laureada que tiene su quesería en Zugarramurdi. Ahí mismo, pero hace cientos de años, nos contarán la historia de María, la partera del pueblo. (La mujer que inicio el proceso de brujería en Zugarramurdi en 1610 y la mujer a la que acusó, también se llamaban María; bonito homenaje que no te dice a priori, si la partera es de lo buenos o de los malos)


Estas tres historias (cuatro mujeres; por un lado el tandem Altuna-Cestero, por otro la quesera y luego la partera medieval) se funden en un thriller que se devora. Ritmo perfecto, capítulos cortos y de nuevo, la ambientación como gran viaje. Se nota mucho que Ibón se inició en la literatura escribiendo libros de viaje y que es gran viajero y gran observador. Así como en "La fábrica de las sombras", Orbaizeta resulta asfixiante, en "El Último akelarre" uno siente la carga dramática del pueblo, la presión de la frontera (la muga) y a la vez, se siente absolutamente cautivado por ese mismo paisaje.


No me enrollo más. Si os apetece una novela negra fácil, española, con toques históricos, con costumbrismo y con mucha acción, seguid a Leire en su viaje por el pirineo navarro. Y si andáis por ahí, por Dios, entrad en un bar que tiene una carpa grande anexa y pedirle al camarero que os de un trozo del pastel vasco que hace su amatxu. Aún estoy salivando...




9 visualizaciones0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo

コメント


bottom of page